El Coco… esa fruta redonda y peluda que siempre está en la frutería y que no debe de faltar en tu nevera o heladera.
¿Sabías que tiene muchas y muy buenas propiedades para tu salud física?
En este artículo te voy a dar varios motivos para que en tu nevera y siempre a mano, tengas uno o dos cocos partidos y cortados a rodajas.
Cuando partimos un coco, sale el agua de coco.
La primera es para saber si el coco está bueno. Si ves que el agua que sale del coco tiene muchos grumos y es algo espesa, y al probarla notas un sabor agrio, ya puedes tirar ese coco que no te ha salido bueno.
En el mejor de los casos podrás ver por dentro una vez abierto, las partes que están picadas y quitarlas, dejando nada más que lo que está bueno.
Sin embargo, si el agua es clarita y tiene un sabor dulce intenso… como si fuera un caramelito de coco, entonces ese coco va a ser una delicia.
Lo que yo hago al elegir el coco en la tienda es mirar siempre el aspecto exterior.
Al igual que miras las manzanas o los plátanos antes de elegirlos, haz lo mismo con el coco.
Todo aquel coco que tenga una especie de moho blanquecino, que el «pelo» que lo recubre no sea uniforme y tenga como calvas, o el que tenga partes más oscuras que otras, no lo cojas.
Elige siempre los que sean más uniformes en cuanto al aspecto exterior. La forma y tamaño va a depender de la variedad, pero siempre que el aspecto exterior del coco tenga buena presencia.
Para la segunda cosa que sirve el agua de coco es para bebérsela.
El agua de coco está riquísima, y es una fantástica fuente natural de hidratación.
Guarda el agua de coco en la nevera y al terminar el entrenamiento, tómala.
El agua de coco es rica en vitamina C, potasio, hierro, magnesio, fósforo y cobre.
En los últimos tiempos muchos deportistas de élite toman agua de coco durante y después del entrenamiento ya que es uno de los mejores productos naturales que aportan altos niveles de antioxidantes, minerales y electrolitos a los músculos, es regulador de la presión sanguínea y es energizante.
Es una de las mejores bebidas isotónicas que la naturaleza pone a tu alcance.
Por ese motivo, no desperdicies nunca el agua de coco y tómala.
Si no haces deporte, no pasa nada porque también la puedes tomar ya que es totalmente saludable.
Vamos ya con la fruta.
Ya sabes que viene en una dura corteza que tienes que romper para acceder tanto al agua como a la fruta.
En mi caso, esta corteza la rompo con un martillo.
Pongo en coco en la mano izquierda y con la mano derecha voy dando martillazos sobre el coco.
Tras cada martillazo, giro un poquito el coco para que los golpes vayan reblandeciendo la corteza exterior de manera uniforme. Así es más fácil que se hagan muchas grietas y esto facilita la separación del fruto de la corteza.
Si una vez abierto el coco parte de la fruta se queda adherida a la corteza, haz pequeños cortes dentro de la fruta y mete un cuchillo sin punta entre la corteza y la fruta.
De esta manera, en pedacitos pequeños será mucho más fácil separar el coco de la corteza.
Esta es la técnica que yo utilizo.
Si tu tienes una más fácil y la quieres compartir con todos, deja tu comentario.
Entre otras cosas, el coco va a ayudarte a elevar los niveles de colesterol bueno y es un buen antiinflamatorio.
Al igual que la comida procesada sí que provoca inflamación debido a su acidez, el coco fresco y el agua de coco son alimentos muy alcalinos que reducen la inflamación.
Los alimentos alcalinos reducen la inflamación dentro de tu cuerpo y producen gran beneficio a tu organismo, entre otros el fortalecimiento del sistema inmunológico y mejorar la capacidad de absorber los nutrientes de los alimentos, todo lo contrario que los efectos que produce la comida procesada.
Es una fruta que te aporta energía casi instantánea y claridad mental. Te hace sentir bien.
También tiene un alto contenido en fibra, y ya sabes que esto es muy bueno para tu intestino.
Entre sus beneficios, el coco tiene gran capacidad antibacteriana.
Puede ayudarte a mantener limpio tu sistema digestivo.
Si sientes algún síntoma raro en tu sistema digestivo, comienza a tomar coco a media mañana y a media tarde en ayunas, sin nada en el estómago. Solamente el coco. Vas a notar mejoría a lo largo del día.
Se está escribiendo mucho últimamente sobre si el coco engorda o si el coco adelgaza.
Mi experiencia es que es una fruta saciante, activa el metabolismo, produce mucha energía y claridad mental cuando la tomas y está muy rica y bajo mi punto de vista, no engorda y es muy saludable.
La mayor pérdida de peso que he tenido el verano pasado fue cuando cada día me comía medio coco. Y no sólo perdí peso (6 kg) sino que me encontré muy enérgico y con sensación de felicidad.
Ya sabes que cuando te pones a perder peso con cualquier plan que reduce las calorías, se queda una cara de pena… pues esto no me sucedió a mí con el Coco.
Ahora… esta es mi experiencia. Seguramente haya otra persona que diga lo contrario.
A mí me ha ido perfecto. Es más, sigo tomándolo cada día a media mañana y siempre tengo en la nevera un coco cortado a rodajas.
Otro efecto que tiene el coco sobre la pérdida de peso es que es beneficioso para el tiroides.
Puede hacer más eficiente el funcionamiento del tiroides y esto ya sabes que tiene un efecto positivo sobre la pérdida de peso.
Cuanto mejor funcione el tiroides, más eficiente serás para quemar grasa, entre otras cosas.
Bajo mi punto de vista, el coco es un alimento que no debe de faltar en la nevera o heladera.
Es saciante, está muy rico y produce multitud de beneficios a tu organismo.
Si no tienes muy claro el efecto sobre la pérdida de peso o escuchas a científicos y expertos decir que el coco es un producto prohibido para la pérdida de peso, recuerda siempre el dicho;
“En el punto medio está la virtud”
Un poco de coco al día, te dará más beneficio que perjuicio.
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Pedro García
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