Con toda la información de la que disponemos hoy en día, cada vez tenemos más claro cuáles son los pasos que debemos de ir dando para mejorar la salud física y vamos aprendiendo a crear hábitos que nos encaminan hacia ese destino, incorporando pequeñas modificaciones en nuestra rutina de cada día.
Hoy subimos al siguiente nivel y nos vamos a centrar en dos tipos de grasas que seguro tienes en tu nevera, una buena y otra menos buena.
Para ello te planteo esta pregunta;
¿Tomando más proteína?
¿Reduciendo los azúcares?
¿Quitando grasas?
¿Eligiendo cada vez más alimentos crudos como pueden ser las frutas?
Por lo primero que debemos de comenzar es por quitar el miedo a comer grasa.
Las grasas son necesarias para que tu cuerpo funcione correctamente. De hecho tus células necesitan grasa para centenares de procesos que ocurren cada día dentro de tu cuerpo sin que tú lo sepas.
Pero claro, hay grasas buenas y grasas menos buenas. La clave es saber elegir las grasas buenas.
Te dejo con un artículo que te ayudará a ello.
Y podemos comenzar a elegir grasas saludables desde la primea comida del día.
En España y en prácticamente todos los países del mundo, es típico desayunar.
El desayuno no es otra cosa que romper el ayuno que has realizado tras toda una noche durmiendo.
Aunque no esté de moda, ya que parece que la última tendencia es ayudar, desayunar es una costumbre que si la realizas bien, te aporta más beneficio que perjuicios.
Uno de los productos típico para tomar en el desayuno es pan con mantequilla o margarina.
En Deporte y Salud Física quiero darte unos detalles para que a partir de ahora los tengas en cuenta.
Después de ver esto, sobre el papel parece que la margarina es algo mejor para perder peso ya que tiene menos calorías, pero no te dejes engañar… el contenido de grasa “Trans” que lleva en su interior… juega en su contra y los nuevos estudios que hay acerca de la mantequilla, le dan muchos puntos para contar con ella en el desayuno.
Múltiples estudios relacionan el consumo de mantequilla con una buena salud.
En esta revisión, el consumo de mantequilla no se asoció significativamente con enfermedades cardiovasculares, cardiopatías coronarias o accidentes cerebrovasculares. Sin embargo un mayor consumo se asoció con una menor incidencia de diabetes.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27355649/
Múltiples compuestos en la grasa butírica que tiene la mantequilla están asociados con beneficios para la salud.
Uno de los más conocidos es el CLA, que no solo es anticancerígeno, sino también saludable para el corazón y antiinflamatorio con efectos antiobesidad.
https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S1043452619300312?via%3Dihub
Por sabor y por saludable, la mantequilla gana a la margarina.
Si alguna vez dudas entre la mantequilla y la margarina, elige siempre la mantequilla. Y si es orgánica, mucho mejor todavía.
Y si puedes elegir Ghee, todavía mejor.
Este lo puedes hacer en casa y potencia todavía más el sabor y los efectos beneficiosos de la mantequilla.
Sus grasas saturadas de origen animal son más beneficiosas y saludables para el organismo que las «Trans» de la margarina.
Si buscas otra opción rica en sabor y llena de grasas de calidad desde el primer bocado de la mañana, hay una opción muy interesante y también saludable.
Empieza la primera comida del día con un buen chorro de aceite de oliva y un par de rodajas de aguacate.
Pero recuerda que no todos los aceites de olivas son iguales. El mejor de todo es el aceite de oliva virgen extra.
Parece lo mismo, pero no lo es.
En el siguiente artículo te contaré la sutil diferencia que hay entre uno y otro.
No tomes aceite de oliva. Elige siempre aceite de oliva virgen
Sé Feliz
Pedro García
Hay una cosa clara. Si quieres que tu cuerpo te dure en el tiempo, tienes que dedicarle tiempo. Cada vez vivimos más, pero nuestra genética no está preparada para ello. Por este motivo es importantísimo que cada día dediquemos un ratito al ejercicio físico. Te invito a leer el artículo y a disfrutar de este video de Emilio Duró.
La fuerza es la cualidad que te ayuda a ir más rápido y hace que te canses menos cuando haces ejercicio…
¿Dedicas el tiempo necesario al entrenamiento de fuerza?
Te dejo con un par de rutinas para mejorar la fuerza que te darán muy buen resultado y no te llevarán mucho tiempo.
Hay una leyenda urbana que dice que las personas, a medida que vamos siendo mayores, vamos perdiendo masa muscular. Reza la leyenda que para que esto ocurra, es necesario tener una vida sedentaria, pasar muchas horas viendo la tele, no hacer apenas deporte … en definitiva, no mover mucho el cuerpo y haber perdido la ilusión por conseguir metas.
Algunas personas no han escuchado nunca de esa leyenda urbana y por el contrario siguen haciendo ejercicio físico, se marcan cada año nuevos retos y eliminan todos los límites mentales que a esa edad una persona pueda crearse.
Este es el caso de Joan Babot, un chaval de casi 70 años que comenzó a entrenar conmigo hace un año y nunca, nunca, nunca, ha perdido la ilusión. Tanto es así que por ejemplo, en una de las carreras que ha realizado este año ha conseguido rebajar su mejor marca en casi media hora.
Te dejo con el relato de su historia contado por el mismo.
Los baños de contraste (agua fría-caliente) te pueden ayudar a recuperar mucho más rápido de un esguince, distensión… e incluso de un entrenamiento duro.
Si le echas al agua sal, mucho mejor. Acelera tu recuperación, pero no se lo digas a nadie…
El mundo está lleno de tentaciones. Si no eres fuerte, estás continuamente cayendo en ellas:
Un pastelito
Unas pipas saladas
Unos frutos secos fritos…
Aquí tienes 9 snack que saciarán tu hambre entre horas y no te harán coger peso.
Si estás experimentando problemas para dormir, en este artículo te voy a explicar qué beneficios tiene usar gafas protectoras de luz azul y por qué deberías considerar usarlas. La exposición excesiva a la luz azul emitida por dispositivos electrónicos, como teléfonos inteligentes y computadoras, puede afectar la producción de melatonina, una hormona que regula el sueño. Las gafas protectoras de luz azul bloquean o filtran la luz azul dañina, lo que puede ayudar a mejorar la calidad del sueño y reducir los síntomas de insomnio. Si estás experimentando dificultades para dormir y estás buscando una solución natural y no invasiva, este artículo es para ti.
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2 comentarios
Hola Pedro,
Mi hijo es un niño de 11 años, pesa 62.8 kilos y mide 1.53, quisiera que comenzara a hacer deporte de forma continua, pero no sé si tus consejos para adultos sirven también para niños de su edad. ¿Podrías orientarnos al respecto?
Muchas gracias
Hola Vicente
Claro que le valen, pero te digo una cosa, un niño de 11 años tiene que tener hábitos sanos; jugar en el polideportivo, en la calle con los amigos, el fin de semana llevarlo al campo a disfrutar… No hay que comenzar a tan temprana edad a marcarle pautas que le puedan traumatizar a la larga. Recuerda que la mejor manera de perder peso es creando hábitos saludables, no haciendo dietas estrictas.
Vigila sus hábitos, que no pase mucho tiempo frente al televisor… que haga ejercicio, que se apunte a algún deporte en el cole (fútbol, baloncesto, tenis…) que haga cosas de su edad; jugar y divertise, pero también que vaya aprendiendo a crearse hábitos saludables como desayunar obligatoriamente, tomar fruta y verdura, tomar sólo el domingo chuches, por la noche nada de fritos…