Si estás enganchad@ a la Mahonesa, este artículo te puede ayudar a perder peso sin dejar de tomar tu salsa favorita.
Un buen amigo mío (Manujo), un día hablando de qué cosas podía hacer para perder peso me contó lo siguiente:
«Yo hago las cosas más o menos bien, pero es que no sé por qué estoy tan gordo. Desayuno con proteínas, tomo a media mañana una fruta, la comida la hago normal y la cena también… Creo que mi mayor problema está en la mahonesa. Me encanta. Soy capaz de comer solamente mahonesa con pan para cenar. Solamente eso. Está riquísima y depende de qué marcas, unas están más ricas todavía que otras. Trato de comprar las que me gustan menos, pero así y todo, sé que me paso con la mahonesa y estoy seguro de que eso es lo que me impide bajar de peso».
El problema de las salsas son dos.
El primero es las calorías que acompañan a esa salsa, como son el pan o los alimentos con los que la untas. Como está más rico el pan y la comida que tomas junto con la mahonesa, salsa de tomate frito o kétchup, comes más cantidad y a más cantidad, más calorías dentro de tu cuerpo.
El segundo problema es la composición de la mahonesa. Estas salsas tienen cierto «poder de adicción» gracias a los azúcares que contienen, tanto la mahonesa como el kétchup y distintos tipos de salsas. A más azúcar, más rico está, y más te enganchas a ella. No eres capaz de decir que no y cuanto más la tomas, más quieres. Entras en un círculo vicioso sin darte cuenta del que es complicado salir.
Para echarle una mano a mi amigo Manujo, le propuse lo siguiente:
Hacer la mahonesa casera y dejar de consumir la industrial.
De esta forma siempre es mucho más saludable una salsa que lleva aceite, huevo, un poquito de sal y algo de ajo para darle sabor, que una salsa que lleva eso mismo (o ingredientes parecidos) y demás, conservante, colorantes y sobre todo, azúcar.
Manujo tomó nota y esa misma semana se hizo un tarro de medio kilo de mahonesa casera a su gusto. Es un poco exagerado, pero es que le gusta mucho.
Dos semanas después volvimos a vernos y me dijo:
«¿Pues sabes que ya no estoy tan enganchado a la mahonesa? Soy capaz de tomar menos cantidad y el cuerpo ya no me la pide tanto. Estoy controlando bastante la cantidad de mahonesa que tomo y no sólo eso, también como menos alimentos con salsa. El cuerpo no me la pide tanto».
Cuando quitamos el azúcar a los alimentos procesados, estamos rompiendo la cadena que nos engancha, que nos ata, que nos hace ser esclavo y adictos de el.
Recuerda que el azúcar está casi todos los alimentos procesados que tomamos en nuestro día a día;
- Cereales de desayuno.
- Zumos de frutas de todo tipo, tanto industriales como naturales.
- Snacks dulces pero también salados
- Salsas y aderezos como kétchup, mahonesa, tomate frito y todo tipo de salsas industriales y comerciales.
- El pan y la bollería industrial.
- Barritas de cereales.
Y ese azúcar puede estar camuflada bajo distintos nombres como;
- Azúcar
- Azúcar de repostería
- Miel de maíz
- Jugo de caña
- Miel de caña
- Cristales de jugo de caña
- Azúcar moreno
- Sucrosa
- Jarabe de maíz de alta fructosa
- Miel de malta
- Fructosa
- Cebada de malta
- Sucanat
- Concentrados de jugos de frutas
- Dextrosa
- Galactosa
- Sacarosa
- Caramelo
- D-ribosa
- Maltodextrina
- Melaza de arroz
- Jarabe de arroz
- Etil maltol
- Glucosa
- Azúcar invertida
- Sirope dorado
- Maltosa
Trata de romper la cadena que te ata al azúcar y si tienes oportunidad, prepara los alimentos tú mism@. De esta manera estarás comiendo más saludablemente y te darás cuenta de que necesitas menos cantidad de comida para pasar el día, tienes menos ansiedad por comer cosas con azúcar y sobre todo, pierdes peso.
Un último truco para la mahonesa. Si la puedes hacer con aceite de oliva virgen extra, mucho mejor. Más sana y saludable. Es cierto que está algo más fuerte, pero te aporta mucho más que sabor a las comidas. Te aporta ácidos grasos esenciales.
Que sea aceite de oliva virgen extra como vimos en este artículo https://www.deporteysaludfisica.com/no-tomes-aceite-de-oliva-elige-siempre-aceite-de-oliva-virgen/
Espero que este artículo te ayude a conseguir tus metas y comer más sano.
Sé Feliz
Pedro García